El pasado 6 de julio, dimos el pistoletazo de salida al 8º ciclo de lecturas dramatizadas que organizamos conjuntamente Fundació Aisge, Fundació Romea y AADPC, con la obra Dinamarca, de la dramaturga Lluïsa Cunillé, dirigida por Héctor Mellinas.
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En escena, rodeados de un juego de sombras, una madre (Fina Rius) y su hijo (Pep Planas) en una sala de casa.
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La llegada de una carta, enviada por el segundo ex-marido de la madre y al mismo tiempo tío del hijo, es el detonante de la acción. Una situación que recuerda la historia de Hamlet y el triángulo shakesperiano de Gertrudis, madre de Hamlet y esposa del rey, quien muere en manos de su hermano Claudio.
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El hijo pedaleando constantemente encima de una bicicleta que no se mueve de su sitio, es una evidencia escénica del paso del tiempo, de la improductividad del propio esfuerzo y de la voluntad de permanecer aislado en un tiempo y en un espacio mentales. Un Hamlet que ha decidido no participar de lo que entendemos por vida social adulta en la sociedad del bienestar.
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Que placer volver al teatro después de cuatro meses de pandemia y con una obra como Dinamarca!
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